Cuando la administración Trump está cumpliendo sus primeros 100 días en activo, entre sus logros, o más bien lo contrario, está el haber conseguido la mayor caída de los principales índices americanos, si se le compara con la etapa de Bush, Obama o Biden.

Un logro con el que los americanos no estarán especialmente satisfechos, teniendo en cuenta que no era necesario haberlo provocado de forma intencionada, con una estrategia, que para muchos se le ha ido de las manos a la nueva administración Trump.
Los mercados de capitales y las crecientes tensiones en las cadenas de suministros, que está provocando la política arancelaria, han hecho dar marcha atrás en varias cuestiones, lo que está haciendo que el rebote de los mercados esté siendo muy fuerte, en todos los países del mundo, por lo que todo apunta, a que lo peor ya debería haber quedado atrás.
La última tensión se vio durante el pasado fin de semana y comienzos de la presentes, cuando Trump afirmó que estaba pensando en destituir al presidente de la Reserva Federal Americana, Powell, algo que no sentó nada bien a los mercados, dado que la figura del presidente de la FED y su independencia son intocables. En menos de 24 horas el presidente Trump rectificaba y anunciaba el abandono de sus amenazas, algo que provocó, una vez más, una reacción inmediata al alza de las bolsas
Además de ello, en esta semana siguen publicándose resultados de las cotizadas americanas, llamando la atención la enorme caída de los beneficios de Tesla, junto con su cotización en los últimos meses, lo que ha confirmado que su presidente Elon Musk, va dejar la política, para volver a hacerse cargo de la empresa.
En sentido contrario, Alphabet ha superado expectativas, lo que ha dado alas al maltrecho sector tecnológico americano. También ha sido un revulsivo para la renta variable el anuncio por Trump de que tiene intención de bajar los aranceles a China hasta el 50 ó 60%, al tiempo que confirmaba que están ya en negociaciones, que aunque China lo desmiente, lo cierto es que los mercados parecen darlo por bueno.
A falta de tres sesiones para cerrar el convulso mes de abril, podemos afirmar que más de la mitad de las caídas provocadas en el mes, ya se han recuperado, lo que confirma una vez más el poder de los mercados y el acierto de los inversores que mantienen sus estrategias, controlando las emociones en los momentos de mayor pánico e incertidumbre, dejando a los gestores trabajar y a los mercados encontrar la senda de estabilidad de nuevo.
Claramente todas las amenazas no han pasado, por ello será crítico lo que suceda en las próximas semanas con las negociaciones comerciales, así como con la evolución de la economía americana y las declaraciones que puedan venir desde la FED, como ya sucedió esta semana, afirmando que podrían bajar tipos en junio, si los datos macro lo permiten.
María Jesús Soto
Directora El Inversor Inquieto