Una nueva bajada de tipos, tras la de octubre, la cuarta este año. El BCE, en su última reunión de 2024, decidió recortar los tipos de interés de los depósitos, de las operaciones principales de financiación y de las operaciones marginales de préstamo en 25 puntos básicos más, en línea con las expectativas del mercado, hasta el 3,00%, el 3,15% y el 3,40%, respectivamente.
En particular, como explicó Christine Lagarde en la conferencia de prensa, la decisión de recortar el tipo de depósito, a través del cual se guía la política monetaria, se basa en su evaluación actualizada de las perspectivas de inflación, la dinámica de la inflación subyacente y la intensidad de la transmisión de la política monetaria.
Kaspar Hense, gestor sénior de carteras de RBC BlueBay Asset Management cree que ha sido un año muy bueno para Lagarde y el BCE. "Han guiado bien al mercado y han destacado durante el primer trimestre que el mercado se equivocaba al suponer recortes agresivos de tipos en la primera mitad de 2024".
Además, Lagarde reiteró que el proceso desinflacionista está muy avanzado. Según el BCE, la inflación general se situaría en una media del 2,4% en 2024, del 2,1% en 2025, del 1,9% en 2026 y del 2,1% en 2027, cuando entre en vigor el régimen ampliado de comercio de derechos de emisión de la UE. La inflación neta del componente energético y alimentario promediaría el 2,9% en 2024, el 2,3% en 2025 y el 1,9% en 2026 y 2027.
La expectativa de Simon Dangoor, responsable de estrategias macro de renta fija de Goldman Sachs Asset Management, es que el BCE continúe su ciclo de relajación hasta que el tipo de interés oficial se sitúe un punto por debajo del neutral. "El comportamiento de la inflación europea sigue mejorando y el impulso del crecimiento se ha estancado ante la incertidumbre sobre el comercio mundial". Según el experto, a pesar de la bajada de tipos, "es probable que el BCE siga reduciendo el tamaño de su balance en un contexto de aumento de la emisión fiscal, un factor que podría seguir ejerciendo presión sobre los diferenciales de la deuda pública", afirma.
Sin embargo, atención al crecimiento. A pesar de un aumento en el tercer trimestre de este año, los indicadores basados en encuestas económicas apuntan a una contracción en el último trimestre. Los expertos prevén un crecimiento económico del 0,7% en 2024, del 1,1% en 2025, del 1,4% en 2026 y del 1,3% en 2027.
Estas cifras, según Richard Flax, director de inversiones de Moneyfarm, dibujan un panorama sombrío para la economía europea. "Ahora que la inflación ya no es una preocupación acuciante, es probable que la Eurotower siga centrada en medidas de apoyo a la economía en este periodo de crecimiento lento".
Enfoque dependiente de los datos
El BCE está decidido a garantizar que la inflación se estabilice de forma sostenible en su objetivo a medio plazo del 2%. Y, como Lagarde ha reiterado a menudo, seguirá un enfoque basado en los datos, según el cual las decisiones se toman caso por caso en cada reunión para determinar la orientación adecuada de la política monetaria. Como también señala Martina Daga, macroeconomista de AcomeA SGR: "la secuencia de recortes cercanos comenzó cuando tanto la inflación como el crecimiento económico empezaron a sorprender a la baja. Los datos de inflación muestran una clara desaceleración: el crecimiento anualizado de los últimos tres meses es negativo y tanto la inflación general como la subyacente (menos volátil) registraron una dinámica mensual contractiva en noviembre en la zona euro".
Por su parte, Antonella Manganelli, consejera delegada de Payden & Rygel Italia, señala que "el Consejo de Gobierno ha cambiado su enfoque, eliminando la referencia a mantener una política “restrictiva” y adoptando una estrategia basada en datos y decisiones tomadas reunión a reunión".
Un punto en el que también hace hincapié Patrick Barbe, responsable de Renta Fija Europea de Grado de Inversión de Neuberger Berman: "El BCE ha eliminado de su comunicado la frase - los tipos se mantendrán suficientemente restrictivos durante el tiempo que sea necesario -, lo que indica que seguirá recortando sus tipos hasta alcanzar su nivel neutral".
Qué esperar en 2025
La senda de recortes de los tipos de interés aún podría ser larga y prolongarse hasta 2025, como sostiene Dean Turner, economista jefe para la zona euro y el Reino Unido de UBS Global Wealth Management. "En nuestra opinión, el desvanecimiento de las presiones inflacionistas a medio plazo y la debilidad del crecimiento sugieren que el BCE seguirá recortando los tipos en cada reunión hasta junio, situando el tipo de depósito en el 2%. Tal y como están las cosas, el riesgo es que el BCE tenga que hacer más, no menos, para apoyar la economía en 2025. Sin embargo, es más probable que esto se traduzca en nuevos recortes más adelante, en 2025, que en mayores movimientos a corto plazo", explica.
No obstante, Gordon Shannon, gestor de cartera en TwentyFour Asset Management, recuerda que, aunque este recorte era esperado, “es la actualización de las perspectivas del BCE y los comentarios relacionados los que llevan a los inversores a reevaluar el camino de los tipos europeos hasta 2025. Las expectativas de política monetaria entre la Fed y el BCE son cada vez más divergentes, ya que los bancos centrales intentan gestionar fundamentos muy diferentes”.