El mercado de rentra variable de la India (MSCI India) ya se ha recuperado de todas sus pérdidas experimentadas tras el Día de la Liberación y mostrando una rentabilidad positiva acumulada en lo que va de año (Fuente: Bloomberg; MSCI India en USD). Los inversores están confiando más en la macroeconomía con la reaceleración del PIB en el primer trimestre del año. Además, la pausa arancelaria, la debilidad del dólar y un banco central moderado también contribuyeron al ánimo de los inversores.

Con este telón de fondo, el MSCI India cotiza en torno a un PER de 26 veces, bastante en línea con su media de 5 años (27 veces) y mantiene su prima con respecto a los mercados emergentes (MSCI Emerging Markets Index), que cotiza actualmente a un PER de 14,8 veces, en línea con su media de 5 años de 15,2 veces.
Oportunidades de inversión por sectores
Aunque el mercado ha registrado una modesta ganancia en lo que va de año, esto oculta una gran dispersión dentro del índice. El sector defensa ha tenido una rentabilidad muy superior desde principios de año, especialmente tras el aumento de las tensiones con Pakistán. Desde un punto de vista estructural, las crecientes necesidades de inversión en equipamiento militar y defensa de las naciones impulsarán la producción local y proporcionarán fuertes vientos de cola al sector en todo el mundo. El sector financiero también destaca: el crecimiento del crédito, aunque más lento que el año pasado, sigue siendo sólido, y el inicio de la relajación monetaria, combinado con el alivio de algunas restricciones normativas, podría apoyar la concesión de préstamos en los próximos años. En los últimos presupuestos del país, se contempló un nuevo aumento de la cantidad de capex destinada a proyectos de infraestructura, lo que añadió impulso a las acciones de las compañías expuestas.
Riesgos y fortalezas de la India versus otros mercados emergentes
Las elevadas valoraciones de la India (en relación con otros mercados emergentes) se sustentan en las sólidas perspectivas de crecimiento del país y, aunque no vemos motivos a corto plazo para que esta prima desaparezca, los inversores deberían vigilar de cerca las valoraciones y la dinámica de crecimiento subyacente. El crecimiento del PIB se ha visto impulsado en parte por el fuerte gasto público en infraestructuras durante la última década, y aunque los últimos presupuestos aumentaron de nuevo la cuantía del gasto, el Gobierno declaró su ambición de reducir el déficit presupuestario al 4,4% del PIB. Esta disciplina fiscal puede provocar en algún momento una ralentización del gasto en infraestructuras.
Las turbulencias geopolíticas son otro motivo de preocupación, en particular las procedentes de EE.UU. El tono agresivo del presidente estadounidense Trump hacia sus socios comerciales podría dar lugar a aranceles y barreras comerciales, lo suficientemente elevados como para restringir las inversiones en la India. En los últimos años, la India se había convertido en un destino de diversificación, alejando capital de China (por ejemplo, Apple fabrica ahora aproximadamente el 20% de sus iPhones en la India). Sin embargo, las recientes tensiones en la frontera pakistaní, aunque se resolvieron en pocos días, nos recuerdan que estos riesgos regionales nunca pueden descartarse por completo.
En los últimos 3 años (desde el 1 de enero de 2022), la India ha superado al resto de mercados emergentes (MSCI India +23,64% en USD a 2 de junio, mientras que el MSCI Emerging Markets muestra un rendimiento negativo del -6% en el mismo periodo). Esto se debe al crecimiento estructural, que se ha visto impulsado por el gasto público en infraestructuras, una creciente clase media en el país más densamente poblado y las inversiones extranjeras directas en el país, que han mejorado su capacidad manufacturera. El riesgo político también ha sido menos preocupante, en comparación con países de América Latina, por ejemplo, donde las elecciones pueden ejercer presión sobre las cotizaciones bursátiles (como hemos visto recientemente en México, con la reforma judicial del nuevo presidente).
Las valoraciones de la India reflejan estos factores, y la prima de valoración sólo puede mantenerse si la India es capaz de mantener esta trayectoria de crecimiento. Recientemente, entre septiembre de 2024 y hasta abril de 2025, los inversores tomaron algunas ganancias y reasignaron sus carteras, reduciendo su exposición a la India en favor de China, después de que los datos mostraran signos de una ligera desaceleración del crecimiento del PIB de la India, mientras que el Gobierno chino comenzaba a abordar sus problemas económicos internos.