En la tarde del domingo conocíamos que el actual presidente y candidato a las elecciones de noviembre en EE.UU. renunciaba su retirada de la carrera presidencial de 2024, con un cambio significativo en el panorama político. No se hicieron esperar las posiciones de parte de los representantes demócratas, ni tampoco de su adversario. Biden, con 81 años, declaró que cumplirá su mandato hasta el 20 de enero del 2025.
Después de semanas de especulaciones, Joe Biden anunció su retirada de la carrera presidencial, respaldando a la vicepresidenta Kamala Harris como la candidata del Partido Demócrata. Aunque su nominación aún no ha sido confirmada, Harris es vista como la favorita para liderar la candidatura demócrata. Este movimiento ha mejorado ligeramente las probabilidades de que los demócratas mantengan el control de la Casa Blanca, ya que Harris podría cambiar la narrativa de las elecciones, según apunta George Brown, Economista Senior de EE.UU., en Schroders.
El experto añade que
la atención se centra ahora en el posible compañero de fórmula de Harris. Entre los candidatos más probables se encuentran los gobernadores de los estados más asediados y más republicanos. Mientras tanto, las probabilidades de que los demócratas conserven el control de la Casa Blanca han mejorado ligeramente, entre otras cosas porque Harris tiene la oportunidad de cambiar la narrativa de las elecciones.
De acuerdo a Gilles Moëc, economista jefe de AXA Investment Managers, la convención del partido demócrata en agosto 19 en Chicago podría ser decisiva para apoyar a Kamala Harris, como candidata contra Donald Trump. Según comenta el economista, todo apunta que el aparato de campaña de Biden ya ha pasado a trabajar para Kamala Harris.
“Con Trump ahora como el claro favorito en las encuestas, cualquier rival fuerte en el Partido Demócrata podría decidir dejar pasar la carrera este año y concentrarse en 2028”, señalaba el experto. Añadía que dos de los candidatos alternativos naturales, Josh Shapiro, gobernador de Pensilvania, y Gavin Newsom, gobernador de California, optaron por apoyar explícitamente a Harris.
¿Cuál ha sido la reacción de los mercados?
Según Filippo Diodovich, estratega de IG Italia, la reacción de los mercados a la decisión de Biden ha sido muy reducida tanto porque los inversores descontaban este escenario como por el hecho de que las posibilidades de victoria de Donald Trump no han disminuido por el momento. "Creemos que una evaluación más precisa de los efectos en los mercados sólo podrá hacerse una vez que se conozca la imagen completa de los demócratas para la carrera presidencial", añade.
Mientras que Richard Flax, director de Inversiones de Moneyfarm, comenta que el clima reinante es de gran incertidumbre y, como se preveía, los inversores han reaccionado reduciendo algunas posiciones en el Trump trade, con los mercados asiáticos abriendo la semana a la baja, mientras los inversores analizaban las noticias de cara a la votación estadounidense de dentro de 105 días. "Las próximas semanas avecinan un panorama político cambiante y en evolución: a menos que surja un claro ganador en los estados indecisos, podemos esperar que los mercados se rijan más por el ruido que por las señales", concluye.
"Una carrera electoral más equilibrada debería atenuar los temores a un segundo mandato inflacionista de Trump centrado en aranceles y recortes fiscales importantes. Esto ha eliminado, con razón, parte de la tensión en la curva de tipos estadounidense, especialmente en el tramo largo", señala desde abrdn Aaron Rock, responsable de tipos nominales.